viernes, 6 de abril de 2012

ORACIÓN ANTE LA CRUZ



ORACIÓN ANTE LA CRUZ

Ante ti, oh cruz, aprendo lo que el mundo me esconde:
que la vida, sin sacrificio, no tiene valor
y que la sabiduría, sin tu ciencia, es incompleta
Eres, oh cruz, un libro en el que siempre
se encuentra una sólida respuesta.

Eres fortaleza que invita a seguir adelante
a sacar pecho ante situaciones inciertas
y a ofrecer, el hombro y el rostro,
por una humanidad mendiga y necesitada de amor.

Ahí te vemos, oh Cristo, abierto en tu costado
y derramando, hasta el último instante,
sangre de tu sangre hasta la última gota
para que nunca a este mundo que vivimos
nos falte una transfusión de tu gracia
un hálito de tu ternura de tu presencia
una palabra que nos incite
a levantar nuestra cabeza hacia lo alto.

En ti, oh cruz, contemplamos la humildad en extremo
la obediencia y el silencio confiado
la fortaleza y la paciencia del Siervo doliente
la comprensión de Aquel que es incomprendido
el perdón de Aquel que es ajusticiado.

En ti, oh cruz, el misterio es iluminado
aunque, en ti, Jesús siga siendo un misterio.
Amén
 (JAVIER LEOZ)
Gracias al Padre Vicente Vega Soto, de la Ciudad 
De Mexico por esta Oración.

¡VENCES, SEÑOR, Y VIENES DE NUESTRO LADO!



¡VENCES, SEÑOR, Y VIENES DE NUESTRO LADO!
La noche que pretendía ser siempre noche
es rota y descolocada por la luz de tu rostro.
Y, las horas inciertas, resultan ahora ser eternas
con inmortal música de fiesta:


 ¡HA RESUCITADO!
La muerte, traicionera y demoledora de sueños,
es a tus pies, oh Cristo, humillada y rendida
Sometes, Jesús, y con tu conquista
todos nos sentimos agraciados
bañados en un torrente de salvación y de futuro


¡HAS RESUCITADO, SEÑOR!
Atrás quedaron las dudas y las traiciones
por delante nos aguarda el abrazo del Padre
A las espaldas quedaron deserciones y cobardías
falsos juicios y manos que pretendieron quedar limpias.
Ahora, en esta hora de la Noche Santa,
la humanidad es preñada de luz resucitada.
El llanto dará lugar a la alegría de Pascua
Las lágrimas se convertirán en oasis de esperanza
y, el aguijón de la muerte, aunque lastime
ya nunca tendrá la última palabra.


¡HAS VENIDO, SEÑOR, DE LA MUERTE A LA VIDA!
Hoy, con tu triunfo, levantamos el nuestro
Hoy, con tu vida, queda la nuestra sentenciada:
marcharemos, para volver definitivamente
moriremos, para resucitar ante el Padre
dormiremos, pero con tu muerte y resurrección,
seremos elevados a una existencia plena.


¡HAS VENIDO, SEÑOR, DE LA OSCURIDAD A LA LUZ!
Sigue, oh Señor, infundiéndonos valor y coraje
para que, en las frecuentes noches negras,
sepamos encontrar el mensaje de esta Pascua.
Sigue, oh Señor, engendrándonos fe y esperanza
para que, en las derrotas y en los fracasos,
no olvidemos el fruto de tu redención:
hay que morir para vivir.


¡GRACIAS, VENCEDOR DE LA MUERTE!
El mundo, asomándose a tantos vértigos
necesitamos de tu aliento y de tu rescate
El mundo, dejándose llevar por la apariencia
precisará, tarde o temprano, de la Verdad Eterna


¡GRACIAS, CONQUISTADOR DE LA VIDA!
Ha merecido la pena seguirte, amarte
y ser testigo de esta noticia en nuestra tierra.
Gracias al Padre Vicente Vega Soto, de la Ciudad 
De Mexico por esta Oración