lunes, 21 de marzo de 2011

" AL COMENZAR UN NUEVO DIA"


" AL COMENZAR UN NUEVO DIA"

Buenos días, Señor,
a ti el primero encuentra
la mirada del corazón,
apenas nace el día;
Tú eres la luz
y el sol de mi jornada.
Buenos días, Señor,
contigo quiero
andar por la vereda;
Tú, mi camino,
mi verdad, mi vida;
Tú, la esperanza
firme que me queda.
Buenos días, Señor,
a Ti te busco.
Levanto a Ti las
manos y el corazón,
al despertar la aurora;
quiero encontrarte
siempre en mis hermanos.
Buenos días, Señor resucitado,
que traes la alegría al
corazón que va por tus caminos,
vencedor de tu muerte
y de la mía!.

Amén.
(Agradecemos a Ing. Glenda Ruiz
de Ramírez, que nos envió esta
hermosa oración.)

_________________

TIPS PARA HACER ORACION…

¡JESÚS CONFÍO EN TI!
A veces se puede hacer oración también reflexionando
en lo que Jesús nos diría cuando nuestra fe flaquea
el quiere que confiemos en el.

Maru M. de Pozos, no envía esta hermosa oración. )

¡CONFÍA EN MÍ!

¿Por qué te agitas y confundes por los problemas
que te trae la vida? Déjame controlar todas tus cosas
e irán tornándose mejores.

Cuando te entregues totalmente a Mí, todas las cosas
serán resueltascon tranquilidad, de acuerdo a Mis planes.

No te frustres, no me ores como apresurándome

como si quisieras forzarme a realizar tus planes.

En lugar de eso, cierra los ojos de tu alma y con
paz dime:

"¡JESÚS YO CONFÍO EN TI!".

Trata de evitar esos pensamientos que te angustian
al querer comprender las cosas que te pasan.

No arruines Mis planes tratando de imponer tus ideas,
déjame ser tu Dios y actuar libremente en tu vida.
Entrégate a Mí con completa confianza y deja tu futuro
en Mis manos. Dime frecuentemente:

"¡JESÚS YO CONFÍO EN TI!".

Lo que más te lastima es cuando tratas de razonarlo
todo de acuerdo a tus pensamientos e

intentas resolver tus problemas a tu manera.
Cuando me digas,"JESÚS YO CONFÍO EN TI", no seas
como el impaciente que le dice al doctor: "cúreme",
pero le sugiere la "mejor" forma de hacerlo.
Déjate curar por Mis brazos Divinos, no tengas miedo,
Yo te amo.

Si ves que las cosas se vuelven peores o más complicadas,
aún cuando tú estás orando; manténte confiando en Mí,
cierra los ojos de tu alma

y continúa diciendo a cada hora:

"¡JESÚS YO CONFÍO EN TI!".

Necesito Mis Manos libres para poder manifestarte
Mis bendiciones.

No ates Mis Manos con tus absurdas preocupaciones.
Satanás quiere que te frustres, hacerte sentir triste,
quitarte la paz.

Confía en Mí, descansa en Mí, entrégate a Mí Yo hago
milagros en la medida en que tú te abandonas a Mí y
de acuerdo a la fe que me tienes. Así que no te
preocupes, dame todas tus frustraciones y duerme
en paz, y siempre dime: "¡JESÚS YO CONFÍO EN TI!"

y verás grandes milagros. Te lo prometo con todo
Mi Amor...
TU AMIGO JESUCRISTO.

"SEÑOR Y DIOS MIO"



"SEÑOR Y DIOS MIO"

Señor y Dios mío,
mi punica esperanza,
óyeme para que no sucumba al desaliento
y deje de buscarte.
Dame la gracia de que yo
ansíe siempre ver tu rostro
dáme fuerzas para la búsqueda,
tú que hiciste que te encontrara
y que me has dado esperanzas
de un conocimiento más perfecto.
Ante tí está mi firmeza y mi debilidad
sana esta, conserva aquella,
ante tí está mi ciencia y mi ignorancia
si me abres, recibe al que entra,
si me cierras el postigo, recibe al que llama,
Haz que me acuerde de tí,
que te comprenda y te ame.
acecienta en mí estos dones,
hasta mi cambio completo,
cuando arribemos a tu presencia,
cesarán estas muchas cosas
que ahora hablamos sin comprenderlas,
y tú permanecerás todo en todos,
y entonces,viviremos simpre,
alabándote unánimemente,
Y hechos en tí
también nosotros una sola cosa....
Amén.
(San Agustín)
(Agradecemos a Irma Vargas que nos envió esta
hermosa oración)

EL "PADRE NUESTRO" DE DIOS


EL "PADRE NUESTRO" DE DIOS

Hijo mío, que estás en la tierra,
preocupado, solitario y tentado.
Yo conozco perfectamente tu nombre,
y lo pronuncio como santificándolo, porque te amo.

No, no estás sólo, sino habitado por Mí,
y juntos construímos este Reino
del que tú vas a ser el heredero.

Me gusta que hagas mi voluntad,
porque mi voluntad es que tú seas feliz,
ya que la gloria de Dios es el hombre viviente.

Cuenta siempre conmigo,
y tendrás el pan para hoy, no te preocupes;
sólo te pido que sepas compartirlo con tus hermanos.

Sabes que perdono todas tus ofensas,
antes incluso de que las cometas;
por eso te pido que hagas lo mismo con los que a ti te ofenden.

Y, para que nunca caigas en la tentación,
cógete fuerte de mi mano,
y yo te libraré del mal,
pobre y querido hijo mío.

(J.L. Martín Descalzo)